Existe un tipo de pérdida auditiva que aparece de pronto y sin causa aparente. Se trata de la sordera súbita o repentina, también llamada “hipoacusia neurosensorial súbita idiopática”.
A pesar de que este trastorno es poco común, debe ser atendido de inmediato cuando se presenta, ya que puede llegar a ser incapacitante. Le contamos todo lo que necesita saber sobre este tema para conocerlo a fondo.
La sordera súbita, como su nombre lo indica, es un trastorno que ocasiona una pérdida auditiva repentina que ocasiona sordera, sin que exista un motivo o una enfermedad en el paciente. Una de sus principales características es que se desarrolla en un corto lapso de tiempo, que puede variar entre algunos minutos y 72 horas, afectando a hombres y mujeres por igual.
Asimismo, aunque es posible que perjudique a ambos oídos, en el 96% de los casos la sordera se presenta únicamente de un lado. Es por esta razón que, de inicio, puede pasar desapercibida para algunos pacientes, puesto que logran escuchar los sonidos de su alrededor con un oído, mientras refieren que el otro se siente como “tapado”. Sin embargo, este síntoma no debe ser pasado por alto, pues es un primer indicador del comienzo de este trastorno.
En primer lugar, es importante señalar que la sordera súbita es una emergencia médica, por lo que resulta crucial acudir con un médico especialista en otorrinolaringología en cuanto se perciba la falta de audición o se tenga la sospecha de padecerla.
Especialmente, porque, después de 30 días de su aparición, es posible que este trastorno se instale en el oído, ocasionando una sordera completa e irreversible.
De hecho, entre más pronto se inicie un tratamiento, existen mayores probabilidades de conservar una parte de la audición, logrando, en algunos casos, que la pérdida auditiva sea de carácter moderado. Si ese es el caso, es posible la utilización de aparatos auditivos que, si bien no curan el padecimiento, pueden ayudar a compensar el déficit de audición. Sin embargo, para esto, se requiere de una valoración audiométrica que indique si la persona es candidata al uso de estos equipos.
Por lo demás, la pérdida auditiva súbita es un trastorno que, en la mayoría de los casos, no responde a una causa precisa. Así que no existe un único tratamiento a seguir. Se le ha relacionado con infecciones de tipo viral, que llegan a inflamar los nervios del oído interno (p.ej. rubéola, sífilis, citomegalovirus, toxoplasmosis), así como con alteraciones vasculares, lesiones por ototoxicidad y enfermedades autoinmunes, por mencionar algunas.
Pero, en cualquiera de los casos, lo más importante es detectarla y tratarla a tiempo, para incrementar las posibilidades de recuperar la audición y mejorar la calidad de vida de quienes la padecen.
Si su médico especialista considera que necesita audífonos de sordera, también llamados auxiliares auditivos, para atender esta afección, contáctenos por WhatsApp y descubra la variedad de aparatos que tenemos para usted.
Referencias:
- Lawrence R. Lustig, Pérdida de audición súbita, MD, Columbia University Medical Center and New York Presbyterian Hospital, jun. 2022
- Alfaro Juárez MPM, Ascencio Valdez MM, Millán Gámez YK, Guía de práctica clínica, Diagnóstico y tratamiento de la hipoacusia neurosensorial súbita idiopática, México, Secretaría de Salud, 2010.